lunes, 1 de abril de 2013

EL SIUCIDIO, EL ABORTO Y LA PROSTITUCION


EL SUICIDIO

Un suicido es equivalente al asesinato de uno mismo y desde el punto de vista espiritual es algo negativo, pues estás desperdiciando una oportunidad de progreso espiritual. Equivale a un examen no presentado. Lo que interrumpes en ese momento tendrás que volver a afrontarlo en la siguiente vida.
 En el plano espiritual  una persona que se suicida  suele entrar en un estado de turbación en el que rememoran una y otra vez el momento en el que cortaron su vida y perciben el dolor que sintieron sus allegados como si fuera propio. En este proceso llegan a tomar conciencia de la inutilidad del acto que cometieron. Cuando muestran signos de toma de conciencia y arrepentimiento se les prepara para una nueva encarnación, que suele ser bastante inmediata, donde tendrán que afrontar las mismas pruebas que vinieron a superar en la vida que interrumpieron súbitamente.

EL ABORTO
El asesinato de un neonato no deja de ser un asesinato sólo porque no veamos  la cara de la víctima y percibamos  como sufre… Tampoco ven las caras de sus víctimas los que ordenan un bombardeo y no por ello deja de ser menos grave el delito que comenten.
El espíritu ligado a un ser en gestación lo pasa tan mal como las personas que son torturadas hasta la muerte
Respetar  la vida, que es un don espiritual muy valioso para evolucionar, y no tenemos autoridad para  la interrumpirla  de ninguna forma ni bajo ningún concepto abortar traerá  como consecuencia mucho  sufrimiento  en ti y en las personas que te rodean .

LA PROSTITUCION
La versión hebrea de los diez mandamientos que aparece en el Deuteronomio  su traducción original  no es “NO COMETERAS ADULTERIO ”, sino “NO PROSTITUIRAS ” que equivale a decir. No fuerces a nadie a mantener relaciones sexuales no deseadas.
Esto quiere decir que nadie puede ser obligado a mantener relaciones sexuales no deseadas, ni dentro ni fuera del matrimonio.
La prostitución es algo negativo desde el punto de vista espiritual …Todo ser humano tiene derecho a elegir libremente con quién quiere y no quiere tener relación de pareja, incluyendo la relación sexual, y nadie puede quebrantar ese derecho. Por ello nadie está obligado a unirse a otra persona si no lo desea, ni está obligado a perpetuar una relación, si no lo desea, no puede ser forzada, pues esto sería atentar contra  su libre albedrío.

DANA MILANO

No hay comentarios:

Publicar un comentario